El 6D trajo consigo una victoria aplastante de las
fuerzas democráticas sobre desgobierno encabezado por Nicolás Maduro, la nueva
mayoría se consolido con un discurso centrado en los problemas que hoy vivimos, la gran mayoría de los venezolanos vio una
opción de cambio real, que a pesar de los torpedeos permanentes de las
instituciones a la gestión y algunos errores cometidos por los fuerzas
democráticas, debilito los avances terminando el año con un balance político
negativo.
Múltiples frentes de batalla se abrieron con la llegada
del 2016, donde teníamos las elecciones regionales que sumaria un paso más a la
reconstrucción de abajo hacia arriba en el proceso de acumulación de fuerzas, la posibilidad constitucional de
un Referéndum Revocatorio, la lucha de transformación institucional desde la
Asamblea Nacional, la presión de calle y por último, pero no menos importante,
una mesa de diálogo en el entendido que un gobierno con estas características dictatoriales,
sin negociación es difícil darle la estocada final. Lejos de entender que
ninguno de estos frentes debía abandonarse se nos fue el año sin un plan de
acción conjunto que permitiera abordarlos todos de manera organizada y
disciplinada para obtener el anhelado cambio en el país.
Este gobierno está alejado totalmente de la búsqueda de
la “Suprema Felicidad Social del Pueblo”,
se descompone y se burla de los venezolanos sumergiéndonos a la escasez,
indigencia, inseguridad, inflación, pobreza y hambre. Lo que no logró el
régimen es sacar a la oposición de la
vía constitucional, democrática, pacífica y electoral, en la que se ha fortalecido
como su única ruta para llegar al poder.
No debemos temer a las diferencias dentro de la Unidad,
las diferencias son normales entre los seres humanos y mucho más en una
coalición tan diversa como la MUD; las
fuerzas democráticas encarnan el sentimiento de cambio de la gran mayoría de
los venezolanos, no podemos caer en el juego de división auspiciado por el
gobierno y algunos irracionales de la oposición que buscan enterrar
anticipadamente la unidad, sin entender que por el contrario hay que buscar la
manera de ampliarla.
La Unidad es uno de nuestros más grandes logros en medio
de estas circunstancias tan difíciles.
Las fuerzas democráticas tienen el reto de afrontar este nuevo año
reafirmando los compromisos que dieron paso a la creación de la misma, montados
sobre una estrategia y un discurso común que nos arroje buenos resultados concretos
en el 2017. Tenemos primarias en febrero, elecciones regionales y municipales, a estos
procesos debemos acudir con fuerza para ganar, pues este avance pondría prácticamente en jaque a la cúpula que
hoy nos gobierna.
A Venezuela la vamos a sacar adelante, somos muchos los
que ponemos nuestro granito de arena por un mejor país, estamos más cerca de
llegar a la meta; sobran las razones para seguir luchando por el cambio, estoy seguro que sólo juntos lo lograremos.
Germán González Monagas
Tw: @GermanGMonagas
IG: @Germangonzalezm
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